Mechas californianas

Buenas amores!

Hoy vamos a hablar de las famosas mechas californianas ("Ombre hair" en inglés).

No me podéis negar que las mechas californianas no están de moda. Creo que veo un mediana de 10 personas al día con mechas californianas. ¡Ep! Que yo me incluyo, ¿eh?
Así es, hace poco decidí hacérmelas, y adoro como me han quedado! Me quedan con un toque sutil pero notándose. 

Para quien no sepa de que estoy hablando, las mechas californianas son, empezando por las puntas, un degradado de más claro a oscuro. De manera que la raíz de nuestro cabello queda más oscura que la punta. Estas mechas intentan lograr el efecto del sol o el efecto del paso del tiempo (es decir, nacemos rubias y poco a poco, con el paso del tiempo, el color de nuestro cabello se va oscureciendo. Así que queda, de manera natural, el efecto de esas mechas).

Se pueden hacer de dos maneras: con un tinte más claro que el color de tu cabello o con un decolorante.

Yo me las hice en casa y escogí el decolorante, ya que creo que el color queda más exacto al de tu cabello. Me lo dejé poco rato, tampoco quería algo muy exagerado y como era la primera vez tenía un poco de miedo de pasarme.

Compré el famoso kit de mechas californianas de l'óreal, y decir que me ha ido genial. Simplemente tienes que escoger el kit segun el color que tengas y seguir las instrucciones para mezclarlo, pero:

¿Como aplicarlo?
La manera más fácil y que da más buen resultado (según yo) es:
Aplicar en las puntas bastante cantidad de tinte y dejarlo reposar diez minutos. Una vez pasado ese tiempo, aplicaremos con menos abundancia un poco más arriba de donde lo habíamos aplicado y dejamos reposar otros diez minutos. Y así sucesivamente hasta llegar a la altura deseada. L'óreal recomienda hasta las orejas, pero personalmente, prefiero solo puntas.

Y este es mi resultado:

Ya veis, en la peluquería costaría doble de lo que cuesta el kit (que por cierto a mi me costó 7.95 en el "Mercadona")

Espero que os animéis a probarlo, yo lo encuentro tan estético...
Un abrazo psicológico y nos vemos próximamente:
Chau!